Vadillo relanza al Granada CF (1-2)

El gaditano, principal protagonista en el triunfo rojiblanco ante un CD Lugo que recortó distancias y pudo, incluso, empatar el choque

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Los jugadores del Granada CF celebran el primer tanto del partido | Foto: La Liga
Chema Ruiz España
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Abrió el marcador con un latigazo al más puro ‘estilo Cristiano Ronaldo’ y, con una lujosa pisada dentro del área, posibilitó el ilegal derribo a Rodri que acarreó el segundo tanto. No pudo evitar el habitual sufrimiento nazarí, sobre todo después del gol de Cristian Herrera, pero Álvaro Vadillo disipó las dudas guiando al Granada CF hacia un triunfo muy necesitado tras el tropiezo en Gijón. El conjunto rojiblanco se ha impuesto esta tarde al CD Lugo por un ajustado 1-2 en un encuentro muy tosco e igualado, decidido finalmente gracias a una genialidad del 'siete' granadinista y un tanto desde los once metros de Adrián Ramos.

El contraste de sensaciones -y de posiciones- con el que ambos conjuntos se presentaron en el Anxo Carro se trasladó a las alineaciones. Alberto Jiménez Monteagudo, convencido de que podría ‘buscar las cosquillas de los nazaríes’, puso en liza las mismas caras que golearon en Córdoba. Su homónimo en el banquillo contrario, Diego Martínez, decidió sorprender. Ante el alarmante problema goleador de sus hombres de ataque, volvió a optar por Rodri como único punta en su esquema, mientras que Vadillo retornó al ‘once’ tras dos suplencias consecutivas para paliar la baja por sanción de Fede Vico.

No se apreció tanta disparidad, en cambio, con el balón en movimiento. El cuadro rojiblanco horizontal, enlutado esta tarde, saltó al césped dispuesto a disipar las dudas desde el primer minuto. Trató de ejercer el rol dominador que se le presuponía con su planteamiento habitual, combinando con calma hasta llevar el balón a los flancos, donde buscaba profundizar. Sin embargo, el conjunto lucense, que habla otro fútbol, tenía claro cómo desconectar a los nazaríes.

El cuadro albivermello propuso un encuentro mucho más físico, encorsetando la medular granadinista, que apenas entró en juego durante el primer acto, y buscando dañar a su rival al galope. Aburjania dio el primer aviso a los cinco minutos de juego con un disparo alto, aunque fue en el ecuador del primer tiempo cuando llegó el auténtico peligro para la meta de Rui Silva, que erró hasta en dos ocasiones sin consecuencias en el electrónico.

La autoridad nazarí de los primeros compases fue diluyéndose y la congoja comenzaba a rondar al conjunto dirigido por Diego Martínez, que en la primera media hora solo había registrado algún tímido acercamiento a la meta de Juan Carlos, pero el guion sufrió un inesperado y repentino giro. En el minuto 33’, Montoro sacó la escuadra y el cartabón para mandar al segundo palo una falta escorada a la banda izquierda. Su centro, tras botar en el corazón del área, fue rematado por Antonio Puertas al poste. El rechace del almeriense quedó muerto en las botas de Rodri, que erró de manera incomprensible. Amagó en lugar de disparar a puerta vacía, lo que propició que la zaga se adelantase y le arrebatara el esférico, si bien el soriano pidió penalti. Aún no tocaba

El despeje de esta acción acabó con un contundente choque entre Aburjania y Quini que el colegiado señaló a favor de los visitantes. La falta se produjo en la zona de tres cuartos de campo, aunque esto importó entre poco y nada a Álvaro Vadillo. El gaditano, que había sido el más activo en la parcela ofensiva, no se lo pensó y lanzó un auténtico trallazo que taladró la red de Juan Carlos.

La hipnótica y plana parábola efectuada por el disparo del ‘siete’ granadinista abrió el marcador y deparó diez minutos de calma en el cuadro visitante, que recuperó el control hasta el intermedio. A la vuelta de los vestuarios, en cambio, la situación se tornó por completp. El Lugo volvió a sentir la presión del farolillo rojo y, entre un sinfín de imprecisiones y una tensión creciente, atenazó a los de Diego Martínez.

Gerard Valentín, que había sustituido en la primera parte al maltrecho Tete Morente, pudo igualar el choque en el minuto 51, tras un pase filtrado por José Carlos Lazo que le permitió entrar solo al área nazarí. No obstante, al gironés se le fue largo el control y acabó golpeando la rodilla de un atento Rui Silva que, pese a ser atendido, pudo continuar sin problemas.

Se sucedieron las interrupciones y los rifirrafes, pero el Lugo comenzó a asediar el área del conjunto visitante, al que ya le apretaba en exceso el cuello de su camiseta. El choque parecía destinado a convertirse en un continuo acoso local a la muralla nazarí y que habría que ver cuánto aguantaba esta, pero entonces llegó el segundo del Granada.

Rodri recuperó el balón en la línea divisoria y Ramos, que acababa de entrar al terreno de juego, comenzó a correr por la banda derecha. El cafetero vio la llegada de Vadillo, que adelantaba a un Rodri también a la carrera, y se la entregó con espacio. El gaditano la pisó para dejarla al punta soriano, que fue derribado en el área. Díaz de Mera Escuderos señaló la pena máxima y Ramos, muy necesitado de goles, no perdonó en el minuto 72.

Pero el gol, más que dar paso a la tranquilidad definitiva, introdujo la habitual angustia granadina. Dos minutos más tarde, Aburjania condujo el balón hasta la esquina izquierda del área granadina, donde lo descargó hacia la carrera de Gerard Valentín. El albivermello pisó línea de fondo y la puso con potencia al primer palo, donde apareció Cristian Herrera para anotar a placer y reavivar a sus compañeros.

Y pudo reinstaurar las tablas otros dos minutos más tarde. En una acción similar, Gerard Valentín recortó a Quini dentro del área y envió el esférico para la llegada nuevamente de Cristian Herrera. Su disparo, en esta ocasión, salió hacia atrás, provocando un suspiro de alivio en más de un aficionado nazarí. Los de Diego Martínez se enfundaron el mono de trabajo para rearmar la fortaleza granadina, que, no sin apuros, logró desviar el incesante envío de balones lucense para sumar tres puntos que le mantienen en la lucha por el ascenso directo y le reconcilian con la victoria lejos de Los Cármenes.

Ficha técnica:

CD Lugo: Juan Carlos; Campabadal, Vieira, José Carlos, Luis Ruiz; Tete Morente (Gerard Valentín 26’), Josete Malagón, Aburjania, José Carlos Lazo; Cristian Herrera (Toni Martínez 86’) y Dani Escriche (Manu Barreiro 66’).

Granada CF: Rui Silva; Víctor Díaz, Germán, José Antonio Martínez, Quini; Fede San Emeterio, Montoro; Vadillo, Antonio Puertas (Ramos 65), Dani Ojeda (Pozo 58’); y Rodri (Ramón Azeez 77’).

Goles: 0-1: Álvaro Vadillo, de falta, min. 35; 0-2: Ramos, de penalti, min. 72; 1-2: Cristian Herrera, min. 74.

Árbitro: Díaz de Mera Escuderos. Amonestó a los locales Aburjania y Miguel Vieira, así como a los visitantes Dani Ojeda, Puertas, Montoro y Pozo. Expulsó al delegado de campo visitante Manuel Lucena.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la 35ª jornada de la Liga 1|2|3 disputado en el estadio Anxo Carro, ante 3.826 espectadores. Antes del comienzo del partido se guardó un minuto de silencio en memoria del padre de Iriome, futbolista del CD Lugo.







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