La Casa de los Tiros acoge la muestra ‘El pasado presente. El retablo de maese Pedro, 1923-2023’

El Museo Casa de los Tiros acoge desde hoy la muestra temporal ‘El pasado presente. El retablo de maese Pedro, 1923-2023’ con la que conmemoran los cien años del estreno de la obra de Manuel de Falla. La muestra compuesta por casi un centenar de piezas históricas originales, de variada procedencia, podrá visitarse hasta el próximo 3 de septiembre, desde dónde viajará hasta Madrid a la Residencia de Estudiantes.

El delegado de Turismo, Cultura y Deporte, Fernando Egea ha asistido a la apertura de la exposición junto a la presidenta de la Fundación Archivo Manuel de Falla, Elena García de Paredes y el director del Museo Casa de los Tiros, Emilio Escoriza organizadores de la iniciativa, junto a otras entidades, que han colaborado para hacer realidad la actividad, que complementa los actos del centenario de la pieza, como la exhibición del Centro Lorca, o la de títeres de cachiporra en Fuente Vaqueros.

La comisaria, Elena Torres ha explicado que la exposición adentra al público en la obra, desde sus orígenes, sus condicionantes, su proceso creativo, las circunstancias del estreno y su pervivencia hasta hoy. Para ello, las siete secciones (como siete fueron los episodios de la partitura original) en las que se articula la muestra, conjugarán el rigor y la riqueza de la documentación original ––en su mayoría procedente del Archivo Manuel de Falla– con el diseño espacial de IK arquitectos, en el que se teje un continuo juego de capas de realidad.

En un amplio recorrido por la exposición el público puede ver borradores de las partituras, una interesante selección bibliográfica que habla de la influencia de ‘El Quijote’ en el universo Falla, correspondencia, fotografías de época, recortes de prensa, junto con piezas de enorme interés, como son los diferentes elementos de la escenografía original diseñada por Manuel Ángeles Ortiz, Hermenegildo Lanz y Hernando Viñes para su estreno en París. Entre ellos destaca el boceto de telón, las maquetas articuladas y los figurines de Manuel Ángeles Ortiz; los bocetos para los decorados de Hermenegildo Lanz, así como los de Viñes o sus conocidos programas de mano.

Para hablar de la presencia de ‘El retablo de maese Pedro’ en el imaginario colectivo, la muestra incluye, además, la obra de reconocidos artistas contemporáneos, como los bocetos de Miquel Barceló para la representación en el Théâtre National de l'Opéra Comique de París, el libro de artista sobre la obra de Soledad Sevilla o los bocetos para la representación del Teatro Principal de Zaragoza con escenografía de Antonio Saura.

Los elogios de la crítica internacional se suman a la alta consideración que recibió la obra por parte de numerosos compositores, que vieron en esta obra una nueva senda por la que transitar. No en vano, esta ópera constituye la primera incursión de la música española en el neoclasicismo, que se impuso en Europa durante el período de entreguerras. Pero, más allá de su papel crucial en la historia, ‘El retablo de maese Pedro’ sigue muy vivo, pues continúa siendo representado en infinidad de teatros por todo el mundo, puesto en pie por importantes escenógrafos y directores de escena que han tejido en torno a la obra toda una red de nuevos significados.