Vídeo | Así afrontan los granadinos las noches con un "calor insoportable"

La ciudadanía apuesta por distintas alternativas para combatir temperaturas nocturnas que oscilan en torno a los 30 grados

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Los granadinos cuentan como han pasado la noche | Foto y vídeo: Javi Gea
David Rodríguez
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Las altas temperaturas son el pan de cada día para Granada. El calor condiciona las actividades a lo largo de todo el día y las personas intentan adaptar su horario para no salir las horas centrales del día. Las noches son largas y complicadas. Cuando llega la hora de ir a la cama, el aire acondicionado o el ventilador son acompañantes habituales.

Las últimas jornadas nocturnas han sido difíciles de asimilar. Muchas personas se tienen que quedar en el interior de la provincia, aunque otros ya cogieron sus maletas con rumbo a sitios más frescos para disfrutar de un clima más amable con la playa más cerca. GranadaDigital ha salido a la calle para hablar con los granadinos sobre sus opciones para pasar las noches lo mejor posible.

Las temperaturas sobrepasan los 40 grados en los picos de las horas centrales, mientras que las mínimas rondan los 25 grados. Los siguientes días, el calor dará algo de tregua con cielos nublosos y mínimas de 18 grados. Lo que está claro que esta temporada estival está dejando a los granadinos "hartos" de esta calor.

Las temperaturas suben igual que las facturas de luz. Muchos ciudadanos tienen claro que para sobrevivir toda la noche es "necesaria la compañía del aire acondicionado". Sin embargo, otros intentan lidiar con estas temperaturas dejando las "ventanas abiertas de par en par" ante la ausencia del aire acondicionado.

Cuando el mercurio está por las nubes, una alternativa es usar mejor el ventilador que el aire acondicionado e intentar no tenerlo durante toda la noche. Una cena liguera después de una ducha con agua tibia y beber agua fresca cuando el sueño se detenga por la noche. Algunos encuestados admiten con sinceridad que apenas pueden conciliar el sueño.

Ante la desesperación hay quien intenta soluciones distintas, como mover el colchón a otras habitaciones del hogar o acostarse "con el pelo chorreando". Todavía restan semanas estivales, pero hay quienes ya han finiquitado sus ganas de verano.







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