La venta de vivienda de obra nueva encara un excelente momento

La venta de vivienda de obra nueva en España atraviesa un buen momento. Al menos, así se reflejó en diciembre de 2022, pues el año se cerró con la venta de 650.000 casas. Unos números que no se habían visto en quince años.

En este sentido, el encarecimiento del precio de la vivienda es un claro síntoma de que la demanda no cesa de crecer. De este modo, la obra nueva ha alcanzado los 2.643 €/m2, mientras que la vivienda de segunda mano se sitúa en los 1.960 €/m2.

Una de las provincias de España en la que se aprecia una clara remontada en los precios es Granada. Así, se ha convertido en la quinta provincia española que muestra uno de los mayores incrementos en el precio de la vivienda en venta en un año junto con Málaga o Baleares.

Este interés por las viviendas de obra nueva en Granada deriva en un importante incremento de la oferta. No en vano, la capital acoge dieciséis promociones de viviendas nuevas que se emprendieron en 2022 en Granada y tiene visos de seguir sumando nuevos miembros a esta particular familia.

Algunos de estos proyectos se centran en ofrecer vivienda de protección oficial (VPO) en alquiler con zonas comunes y muy buenas comunicaciones. No hay que olvidar que la oferta de esta clase de residenciales es una de las demandas constantes de la población que, de este modo, podrá acceder a viviendas de calidad a la medida de sus bolsillos, además de poder hacerlo en alquiler.

Por supuesto, hay quienes desean adquirir una casa con la que llevan soñando mucho tiempo y parece que por fin tendrán opciones para hacerlo. Las construcciones de obra nueva ofrecen ventajas como la posibilidad de adquirirlas sobre plano y, por lo tanto, adecuarlas a sus gustos. Además, estas viviendas son mucho más eficientes que las de segunda mano.

Según las estimaciones oficiales, Granada contará con cerca de 5.500 viviendas nuevas en los próximos años. Algo más de 3.000 de esos nuevos pisos se ubicarán en la zona de expansión conocida como 'Los Oestes'.

También en la costa de la provincia granadina se observa un repunte en la construcción, pues se levantarán 1.300 viviendas. Todo ello pese a la inflación y los problemas con los suministros que sufre el sector.