Los mejores planes que no te puedes perder en Granada este verano

Rutas de senderismo

En tiempos de calor sofocante, andar rodeado de naturaleza cerca de ríos y bosques es algo que no puede faltar. Y en ese sentido, la provincia ofrece en diversas ubicaciones rutas que dejarán al visitante encandilado con sus paisajes. Una de las más populares se sitúa en la Cerrada de Castril, en el sendero que discurre junto al río homónimo. El camino, de 2,5 kilómetros, discurre por puentes colgantes, pasarelas de madera adosadas a las rocas, imponentes cascadas, cuevas... Todo, en un microclima rodeado de naturaleza que reduce en 6 o 7 grados la temperatura respecto al municipio.

Los aledaños de la capital granadina también cuentan con una bella naturaleza a pesar de encontrarse cerca del casco urbano. Una de las rutas más conocidas es la de Los Cahorros, que discurre por puentes colgantes o caídas de agua procedentes del deshielo de Sierra Nevada y del río Monachil. Su punto más icónico es el puente colgante de 63 metros que cruza el desfiladero. Dejando la capital y avanzando hacia el sur, encontramos la ruta de los Bolos de Dúrcal, ideal para verano al discurrir junto a una acequia nazarí que proporciona agua, y que incluso cuenta con túneles excavados en la roca en el transcurso de la zanja. En las mismas inmediaciones del municipio durqueño también encontramos los Baños de Vacamía y Urquízar, unas pozas naturales ideales para refrescarse. No muy lejos, en Padul, encontramos la Ruta del Mamut, de tipo circular e idónea para ir con los más pequeños.

En el Poniente granadino, una de las atracciones naturales más destacadas es el sendero que pasa por los Tajos de Alhama. Se tratan de unos altos cañones erosionados por el paso del río Alhama que en un recorrido de siete kilómetros, muestra la imponente naturaleza del lugar. En la misma zona también se encuentran Los Infiernos de Loja, unas construcciones cársticas a pocos kilómetros del municipio lojeño populares por sus imponentes cascadas en su paso por el río Genil. Solo un poco más al sur, en el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama, se puede disfrutar de otro sendero con baño a las puertas de la Costa Tropical. Es la ruta del Río Verde, en el término municipal de Otívar. Su entrada cuesta dinero, pero en ella se puede apreciar un camino con vistas y naturaleza que finaliza en unas pozas naturales, perfectas para acabar con un chapuzón con agua refrescante.

En el norte de la provincia, es imperdible conocer el Geoparque de Granada, ubicado en el Parque Natural de la Sierra de Baza. Se trata de un desierto ideal para hacer recorridos de senderismo, bicicleta o incluso a caballo. Eso sí, se recomienda que en los meses de verano se visite a primera hora de la mañana o al atardecer, para disfrutar de un paisaje inmejorable y de esta manera evitar las horas de más altas temperaturas.

Imagen del Geoparque de Granada | Foto: Archivo

Sierra Nevada, también en verano

Si de naturaleza granadina hablamos, no puede faltar Sierra Nevada. La imponente formación montañosa también cuenta con actividades perfectamente realizables en el periodo estival. Además de sus múltiples senderos como la que pasa por las Posiciones del Veleta, donde se pueden apreciar todos los picos de la Sierra, también son comunes actividades como el rafting o la escalada, el barranquismo y el parapente para los más atrevidos.

Al otro lado de Sierra Nevada encontramos La Alpujarra, que con sus pueblos colgados en las laderas de la montaña, son también una atracción turística. Lugares como Bubión, considerado uno de los pueblos más bonitos de España por sus serpenteantes calles y construcciones blancas, o la arquitectura de Capileira, son uno de los reclamos de esta región con una gastronomía exquisita.

Para refrescarse

En Granada existen mil formas de darse un chapuzón tan necesario ante el incipiente calor estival. El más evidente y frecuentado punto para ello son los más de 70 kilómetros de Costa Tropical granadina. Algunas de las playa más destacadas son las de Calahonda (Motril), el Ruso (Albuñol) o la Herradura (Almuñécar).

En su mayoría, playas de pequeñas piedras que ofrecen además una buena vida nocturna y combinan con un patrimonio cultural único. Es el caso del Castillo de San Miguel en Almuñécar, justo en frente de la playa de la Caletilla, se puede uno sumergir en la vida de la dinastía nazarí durante el siglo XIII. No muy lejos, en Motril, se erige el Castillo de Carchuna, a escasos metros de la arena de la playa homónima.

Los que quieran diversión para grandes y pequeños, tienen la opción de los parques acuáticos situados alrededor de la provincia. En ellos se puede disfrutar de atracciones y actividades únicas, siempre pasadas por agua. Quizás el más conocido sea AquaTropic, situado en Almuñécar y junto a la costa.

Actividades culturales

El patrimonio cultural es algo presente en todos los rincones de la provincia. La historia que atesora Granada es algo que se puede apreciar en muchas actividades, que pueden servir para entender la cultura de la zona. Y en verano hay que tratar de conocer la provincia evitando las altas temperaturas, por lo que una gran opción para evitarlas es el barrio de las Cuevas de Guadix. Considerada como la “Capital Europea de las Cuevas”, la ciudad accitana tiene más de 2.000 viviendas subterráneas habitadas. Muchas de ellas están abiertas al público y otras son incluso hoteles. Excavadas por el hombre, su temperatura constante entre 18º C y 20ºC hace que su visita sea perfecta para los meses estivales.

El barrio de las Cuevas de Guadix, idóneo para visitar en verano | Foto: Archivo

Mientras, la capital granadina también presenta una visita por este tipo de construcciones. Se trata de las Cuevas del Sacromonte, ubicadas en el popular barrio homónimo. Con casas construidas en la roca, empezaron a ser habitadas en el siglo XV, aprovechando las cuevas naturales que ya existían. Se trata de uno de los rasgos más característicos de esta zona.