Granada afronta una campaña de aceituna "mejor que en los dos últimos años"
Las previsiones rondan las 100.000 toneladas de aceite, en parte, gracias a las últimas lluvias, pero preocupa la falta de mano de obra
La campaña de recogida de la aceituna ya ha comenzado en Granada con unas previsiones más que optimistas. Tras dos años complicados en los que la falta de lluvias ha mermado considerablemente la producción, esta campaña se plantea positiva y es que se espera recoger unos “100.000 toneladas de aceite”, tal y como aseguran tanto Infaoliva como Asaja Granada.
“Teníamos la incertidumbre de si la aceituna podría cumplir su ciclo vegetativo y llegar en buen estado para la recolección, pero las últimas lluvias han hecho que se vaya a cumplir con las previsiones. Vamos a recuperar tres cuartos de una producción normal. Después de dos campañas muy cortas ya se va recuperando la normalidad”, explica Manuel del Pino, secretario general de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores de Granada.
Las lluvias registradas en los últimos días de octubre han permitido que la aceituna llegue a un estado óptimo en el momento adecuado. “Se espera que sea la mejor campaña de los dos últimos años y ha sido gracias a las lluvias. En Granada el temporal no hizo mucho daño, en la zona norte de la provincia sí afectó un poco más, se cayó algo de aceituna, pero muy poca. La aceituna se encontraba en la fase final de la lipogénesis, es decir, formándose el aceite. Las lluvias han hecho que la aceituna, que estaba con un estrés hídrico, se pongan tersas, cojan más peso y se termine de hacer el aceite”, detalla Elena López, presidenta de Infaoliva.
Bajada del precio del aceite
Las previsiones de una recogida importante de aceituna y, por lo tanto, de producción de aceite, ha hecho que el precio del mismo ya presente tendencias a la baja. “Estos años ha subido el precio porque no había aceite”, explican desde Infaoliva, una circunstancia que esta temporada debe revertirse.
Desde Asaja Granada, aseguran que, efectivamente, el precio del aceite está bajando, pero “no debería bajar de los seis euros, aunque no sabemos lo que va a pasar. Es una incertidumbre ahora mismo. El inicio de la campaña ha hecho que la oferta en el mercado aumente y que, por lo tanto, el precio empiece a bajar. Además, salvo Marruecos, todos los países productores van a tener cosecha”, eso sí, Manuel del Pino advierte que “todo lo que sea bajar de los cinco euros en el precio del aceite será un mal precio”.
Preocupación ante la acuciante falta de mano de obra
En el plano negativo de esta campaña se encuentra la ausencia de trabajadores para recoger toda la aceituna que ya está lista para marchar a las almazaras. Asaja Granada reclamó semanas atrás la necesidad de facilitar la contratación de aquellas personas que “quieren trabajar, pero no tienen papeles”.
La contratación de “manera extraordinaria y legal” de inmigrantes irregulares podría ser una de las soluciones al grave problema que afronta el campo en estos meses. “La falta de mano de obra la venimos sufriendo desde hace varias campañas. En esta, que se espera una producción más normalizada, es cuando se ve un mayor problema ya que todos quieren recoger la aceituna cuando está en un punto de maduración óptima. Retrasar su recogida es crear problemas ya que puede venir un temporal, tirar la aceituna y perder calidad y producción”.
Afrontar una campaña de recogida de aceituna como la que se prevé sin la mano de obra necesaria pone en aprietos a un campo que ve cómo cada vez menos gente quiere trabajar en este sector. “De los que pueden trabajar no hay suficientes. Otra parte no quiere trabajar porque ha cumplido su ciclo de jornadas para cobrar el subsidio. Solo nos quedan los inmigrantes ilegales”, apunta Manuel del Pino. En este aspecto, más allá del problema obvio de la falta de documentación de estas personas es que los empresarios “no pueden acudir a la contratación en origen porque no se puede cumplir con el número de jornales que se deben ofrecer ni con los costes de desplazamientos ni alojamientos. Por otra parte, la regularización por arraigo es un proceso muy lento, lleva por lo menos dos años. Además, cuando se legaliza al trabajador, este se marcha a otro sector u otro territorio por lo que tampoco podemos contar con ellos. Nos quedan las personas ilegales que quieren trabajar y que tienen disponibilidad, pero no podemos contratarlos”. Ante esta situación, Asaja reclama una regularización temporal que permita ofrecerles un trabajo legal y que salve tanto esta campaña como las venideras.
Con la campaña de recogida aparecen los robos
Una vez iniciada la campaña de recogida de la aceituna aparece un claro riesgo de que los agricultores vean robado todo su trabajo y sacrificio. La venta sin control se ha convertido en uno de los principales riesgos para quienes cosechan y producen su aceite de forma legal. La facilidad que encuentran los ladrones para producir este aceite en ciertas almazaras hace que el riesgo de robo aumente.
Ante esta situación, almazaras, agricultores, asociaciones y fuerzas de seguridad se unen para tratar de prevenir posibles robos. Así, se envían una serie de advertencias a quienes en estos días se afanan por recoger la producción de sus olivares.
Se recomienda iniciar la recolección por las áreas más próximas a caminos y carreteras, así como en las zonas más visibles; evitar dejar la aceituna recolectada, maquinaria y utensilios en el exterior; trasladar lo antes posible el producto recolectado al puesto de compra, almazara, almacén o depósito; en los momentos de mayor riesgo, ya sea por volumen de producto acumulado, lugar de ubicación de este o fase lunar, adoptar las medidas de autoprotección más adecuadas; atar la maquinaria si se debe quedar en el exterior. Así mismo, los cuerpos de seguridad aconsejan que, en caso de pillar a los ladrones in fragantis se aconseja no enfrentarse a ellos, sino optar por grabar un vídeo, sacar una foto o apuntar la matrícula del vehículo que están utilizando y llamar inmediatamente a las fuerzas de seguridad.