Los barrios de Granada hablan: Albayzín y Bajo Albayzín

La regulación del turismo y la pérdida de vecinos autóctonos, entre las principales preocupaciones del ilustre barrio

FOTOS ALBAICÍN y SACROMONTE (13)
Barrio del Albayzín | Foto: Archivo GD
Sergio Rodríguez Acosta
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El Albayzín es un barrio único, para lo bueno y para lo malo. Sus insignes rincones y su encanto son parte de la cara que muestra Granada al mundo, pero sus vecinos tienen claro que uno de sus mayores atractivos es estar habitado y conservar su identidad de barrio. Este propósito se hace más complicado con el paso del tiempo, pues los vecinos autóctonos son cada vez menos. José Bigorra, presidente de la Asociación de Vecinos del Albayzín, y Lola Boloix, expresidenta de la extinta Asociación de vecinos Bajo Albayzín, muestran su preocupación ante el crecimiento de las viviendas destinadas al alquiler turístico. Ambos representantes alzan la voz en una nueva entrega de 'Los barrios de Granada hablan'.

José Bigorra sostiene que “hay que buscar los procedimientos para que el Ayuntamiento límite las viviendas turísticas”. Su propuesta es que estas computen como establecimientos de alojamiento para que así se cumpla la norma que exige que cada manzana no tenga más de un 40% destinado a hospedaje. "Es un drama", asegura José, quien explica que la consecuencia de este negocio es la reducción de los alquileres de vivienda permanente. “A Granada le puede pasar como a Venecia, que muera de éxito”, advierte.

"Hay calles vacías"

Por su parte, Lola Boloix entiende que “el turismo hay que regularlo y debe ser respetuoso”. “Ahora resulta que hay cuatro apartamentos turísticos en casas donde antes solo vivía una familia”, lamenta. Una de sus principales preocupaciones son las despedidas de soltero, que "tienen a la gente harta". Ante este problema, echa de menos mayor presencia policial en el barrio, por donde “no viene un policía". Además, asegura que Plaza Larga también ha ido a peor desde la marcha de 'La Porrona', quien ponía bastante orden en la plaza. "Hay veces que no tiene ni luz", denuncia. La granadina, recocida por su amplia trayectoria en el movimiento vecinal, afirma con tristeza que hay "calles vacías" y "personas viviendo solas" que no pueden ya ni pedir un favor a la puerta de al lado. Lola, dolida por la pérdida de identidad de barrio, dice sin tapujos que “Granada ha pasado de ser una ciudad agradable a este desastre”

El turismo tiene sus beneficios, pero también un impacto. El trasiego de personas por el Albayzín se nota en sus calles, que requieren de una limpieza frecuente, especialmente tras los fines de semana. José Bigorra reclama más personal y mayor frecuencia en las tareas de limpieza. El portavoz señala que hay "muchos problemas con los perros”, pero tiene claro que "es cuestión de civismo" que las personas se dignen a recoger los excrementos de sus mascotas. Lola critica la reciente puesta de "diez contenedores" en la Plaza de la Merced, pues argumenta que la tirada masiva de basura los fines de semana por parte de algunos negocios termina generando malos olores y mala imagen.

El patrimonio que atesora el barrio es incuestionable, como la necesidad de cuidarlo. Una de las últimas actuaciones impulsadas por el Consistorio ha sido la puesta a punto de 18 aljibes históricos. “Lo que hay que hacer con los aljibes es mantenerlos”, asevera Lola. José recuerda que “hará 15 o 20 años que se restauraron todos", por lo que pide de nuevo "civismo" ante actos como las pintadas.

El presidente de la Asociación de vecinos del Albayzín explica que el Ayuntamiento debería aportar "facilidades" en materia de patrimonio y "cuidar a los vecinos" que necesitan "que sus casas sean habitables", pues acometer arreglos en el barrio siempre es peliagudo. El portavoz no tiene queja en lo que respecta al transporte, aunque apunta que “pendemos de un hilo porque en cualquier momento nos quitan los autobuses”. Asimismo, se toma a broma cuando los visitantes del Albayzín le dicen que por ahí no deberían circular autobuses, pues no caen en que ahí reside gente. “El Albayzín es patrimonio de la humanidad porque está habitado”, proclama.

Lola Boloix resalta la importancia de contar con concejalías de cultura y urbanismo potenciadas para “encauzar” las cosas. Desde su punto de vista, Granada padece "una falta de realidad enorme". La activista recuerda que la Asociación de vecinos Bajo Albayzín bajó la persiana porque "estábamos hartos de que no nos hicieran caso”. Añade que “sin colaboración pública es muy difícil” que el movimiento vecinal llegue a despegar alguna vez en la ciudad. En el Albayzín esperan que sus peticiones sean atendidas en el Consistorio para intentar enmendar los problemas que denuncian Lola y José.







Comentarios

Un comentario en “Los barrios de Granada hablan: Albayzín y Bajo Albayzín

  1. ¿Por qué no se ha pedido opinión a la presidenta de la Asociación de vecinos de San Miguel Alto? San Miguel Alto forma parte del Albayzín y también es Patrimonio Mundial a proteger, así como sus habitantes y las cuevas.

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