UGT ratifica el Acuerdo de Reactivación Económica y Social para paliar los efectos del Covid

El secretario general de este sindicato, Juan Francisco Martín, considera que hay sectores "muy tocados" como consecuencia de la pandemia

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Firma del acuerdo en la Delegación de la Junta en Granada | Foto: Gabinete
Gabinete
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El secretario general de UGT Granada, Juan Francisco Martín, junto al resto de agentes económicos y sociales en la provincia de Granada, ha ratificado este martes el Acuerdo de Reactivación Económica y Social de Andalucía, que se firmó el pasado 30 de julio en Sevilla, y que trata ahora de provincializarse como respuesta a la situación crítica para los trabajadores, las empresas y el tejido empresarial e industrial de la provincia de Granada. Este Acuerdo se vertebra sobre la prevención sanitaria, el relanzamiento del empleo y la actividad empresarial, el fortalecimiento de los servicios públicos y el impulso a los sectores productivos.

En su intervención, el secretario general de UGT Granada, ha expresado el dolor de todo el sindicato por los fallecimientos de tantas personas debido a la Covid-19, por las que aún siguen enfermas y por sus familiares, al mismo tiempo que ha mostrado su solidaridad con quienes han visto afectados su ámbito laboral y han visto peligrar sus recursos, en muchos casos de subsistencia y que se encuentran en una situación de extrema delicadeza.

Ha considerado que si la concertación es siempre importante, en esta situación excepcional es, simplemente, una obligación, porque los ciudadanos esperan que los agentes se entiendan y encuentren  y soluciones a sus problemas. De esta forma, el responsable sindical recuerda que la pandemia ha tenido un efecto mayor en nuestra provincia porque está poco industrializada y tiene una gran dependencia del sector servicios.

Una vez pasado los momentos más duros del confinamiento, y sin bajar la guardia, Martín señala que, manteniendo las medidas de seguridad para evitar cualquier riesgo, ha llegado el momento de la reactivación económica, manteniendo la amplia red de protección de las personas que está sosteniendo actualmente a los colectivos más vulnerables, aparcando los intereses partidistas.

Dicha reactivación debe pasar a juicio del ugetista por el aseguramiento de la liquidez de las empresas que se muestren social y laboralmente responsables, y que se comprometan a asumir cláusulas de protección a los trabajadores. Entiende, además, que el dinero público debe servir para reflotar la economía, pero que debe redundar en la clase trabajadora, en forma de trabajo estable y de calidad. Por eso, opina que la reactivación económica y social en esta provincia pasa inexorablemente por el refuerzo y fortalecimiento de los servicios públicos, siendo imprescindible el refuerzo en sanidad, en educación, en servicios sociales, en dependencia, con más contrataciones públicas, pero de calidad y con procedimientos garantistas.

En la provincia de Granada, señala el responsable sindical, hay sectores muy tocados como consecuencia de la pandemia, que requieren un apoyo decidido y firme: el sector turístico, la hostelería y el sector servicios, para los que la ayuda a los autónomos y a las pequeñas y medianas empresas, así como los ERTE, se han mostrado imprescindibles para mantener las empresas y los empleos, y hay que seguir en esa línea, con la ampliación de esas medidas que esperemos en estos días terminen de acordarse en esas mesas de diálogo social que tantos buenos resultados están dando. Pero también, ha dicho no se puede olvidar que el sector primario necesita de ayuda, la ganadería, la agricultura, y la industria alimentaria. Todos hemos visto en esta pandemia cómo son las que han mantenido la supervivencia de los ciudadanos y son ellos los que hemos reconocido como esenciales en esta pandemia.

Para que tenga resultados, el responsable de UGT ha concluido que se han de vincular las medidas a unos presupuestos que permitan que todo lo acordado sea una realidad, que propicien un futuro de confianza y que protejan a los trabajadores y trabajadoras, a las empresas y a las familias, ya que algunos colectivos lo están pasando francamente mal.







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