¿Qué penas enfrentan los menores por cometer delitos en España?

Los ciberdelitos en el entorno juvenil se han convertido en una preocupación añadida para las instituciones públicas

Detenido un hombre por agredir sexualmente a su bebé, difundirlo en redes y ofrecerla a terceros
El acceso temprano a Internet ha avivado el debate sobre los menores y su relación con la exposición a contenidos inapropiados | Foto: Archivo
GranadaDigital
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Con el reciente caso de presuntos abusos sexuales a una menor en un colegio de Granada por parte de otros alumnos, es importante hacer hincapié en la responsabilidad penal de los menores en España. El acceso temprano a Internet ha avivado el debate sobre los menores y su relación con la exposición a contenidos inapropiados, como la pornografía, y su impacto en el aumento de comportamientos delictivos y problemas en su desarrollo emocional y social.

Los ciberdelitos en el entorno juvenil se han convertido en una preocupación añadida para las instituciones públicas.

¿Qué sucede si el autor del delito tiene menos de 14 años?

En España, los menores de 14 años son inimputables, lo que significa que no pueden enfrentarse a sanciones penales por sus actos, según establece la Ley Orgánica 5/2000, reguladora de la Responsabilidad Penal del Menor. En lugar de penas judiciales, los casos suelen derivarse a servicios sociales, que trabajan en programas de reeducación y apoyo para garantizar que estos comportamientos no se repitan.

Este marco legal busca proteger los derechos del menor y promover su reintegración, pero también genera debates sobre cómo prevenir que estas situaciones se repitan. En el caso de los presuntos agresores de Granada, se han tomado medidas administrativas, como el cambio de colegio, mientras las autoridades educativas y sociales gestionan el caso.

Penas aplicables a menores de 14 a 18 años

Cuando los implicados tienen entre 14 y 18 años, la ley establece diferentes medidas según la gravedad del delito, que incluyen:

  1. Libertad vigilada: El menor debe cumplir con normas específicas y está sometido a un seguimiento cercano.
  2. Prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima.
  3. Prestación de servicios a la comunidad: Trabajo no remunerado en beneficio de la sociedad.
  4. Internamiento en centros cerrados o semiabiertos: En casos graves, puede aplicarse por un máximo de dos años.
  5. Reparación del daño: Indemnización económica o actos que compensen a la víctima.

Estas medidas buscan ser educativas y no punitivas, fomentando la rehabilitación y la reintegración del menor en la sociedad.

El acompañamiento, la formación y la concienciación de los jóvenes con estas habilidades tecnológicas son esenciales para prevenir la ciberdelincuencia juvenil. Muchos jóvenes actúan sin ser conscientes de las consecuencias legales, motivados por curiosidad o influenciados por redes criminales. La educación sobre el uso ético de la tecnología, junto con campañas de concienciación y el apoyo constante de padres y educadores, puede guiar a los menores para que utilicen sus habilidades digitales de forma positiva y eviten problemas legales.