Pionono de anís, una receta centenaria

Las recetas tradicionales son las protagonistas del Obrador de Abades donde puedes encontrar Huesos de Santo, Rosquillo Frito, Rosco de Loja y la especialidad: el Pionono

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Piononos de anís | Foto: Jesus Martín
Imagen: Jesús Martín | Texto: Sofia Plaza @sofiaPlaza
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El pionono se ha convertido en el dulce de referencia de la provincia de Granada, todo aquel que visita la ciudad se lleva una caja de esta 'delicatessen' para asombrar a los suyos con su sabor. Este producto estrella de la reposteria granadina tiene sus orígenes en la repostería árabe. Nacido en Cádiz fue en Santa Fe donde se le bautizó como ‘pionono’ en honor al Papa Pio IX que proclamó el dogma de la Inmaculada Concepción de María.

Con el paso del tiempo se han creado diferentes versiones o diferentes recetas de este dulce, entre ellas, el Pionono de Anís del Obrador de Abades. Un lugar en el que las recetas tradicionales se esconden detrás de cada dulce. El olor a azúcar quemado y a bizcocho casero recién hecho provoca la gula de hasta el menos glotón con cada Hueso de Santo, cada Rosquillo Frito o cada Rosco de Loja que sale del horno. “No hay ninguno igual, todos están hechos con la manga pastelera de forma artesanal”, explica Elvira Maroto, encargada del Obrador de Pastelería y Reposteria de Abades.

El Pionono de Anís sigue, con un cuidado impecable, una serie de pasos hasta conseguir el resultado final. Una vez enrollado el bizcocho con la crema pastelera, se empapa en azúcar con anís, (de ahí el nombre), y pasa a que le pongan la ‘cabeza’ manualmente con la manga pastelera, para luego quemar el azúcar con la plancha, añadirle canela y ‘maquillarlo’ con gelatina de manzana. Una exquisitez de fabricación propia dentro del Catering de Abades donde se encuentra esta obra de arte de la repostería. Y, en la variedad está el gusto, esta receta tradicional se adapta a diferentes modalidades para crear bocados de pionono de chocolate blanco o negro…

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