Consumo prohíbe el uso de los 901 y 902

Muchas son las veces que cuando hemos necesitado llamar a alguna empresa, hemos visto cómo su número de atención al cliente era un 901 o un 902 y, antes de realizarla, hemos hecho cuentas sobre cuánto nos costaría la llamada. Pues bien, a partir de este mismo mes de diciembre, las líneas telefónicas de pago (901 y 902) van a dejar de costarnos el dinero. Y es que, por fin, el Ministerio de Consumo ha tomado cartas en el asunto y ha prohibido que las compañías cobren por las llamadas a estos números.

Fue el pasado martes 22 de diciembre cuando el Consejo de Ministros aprobó una reforma de la Ley General de Defensa de los Consumidores y Usuarios que obligará a las empresas públicas y/o privadas a modificar sus líneas telefónicas de tal manera que se utilicen líneas de tarifa básica. Eso sí, según se especifica en el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicado al día siguiente de la aprobación del documento, solo será obligatorio para aquellas compañías que se dediquen a producir o comercializar bienes o servicios de primera necesidad.

La redacción final de esta medida, que también trata de regular las infracciones y sanciones que la utilización de los números 901 y 902 puede generar, estará sujeta a los cambios que puedan introducirse en su tramitación parlamentaria. Lo que sí se conoce ya es que las sanciones quedarán sujetas a lo que cada Comunidad Autónoma decida, por ser quienes tienen las competencias en materia de consumo.

En este sentido, según informó el Ministerio de Consumo, los teléfonos de atención al cliente de empresas de suministro de agua, gas, electricidad, servicios financieros y de seguros, postales, transporte, protección de la salud, saneamiento y residuos serán gratuitos. El resto de empresas tendrán que contratar líneas móviles o fijas con prefijo geográfico.

Sin embargo, esta reforma no afecta a los servicios públicos, por lo que la Agencia Tributaria, el SEPE o la Policía Nacional seguirán costándonos un dinero extra a los usuarios.

Según FACUA, el uso de las líneas 902 ha costado 711 millones de euros a los consumidores entre 2015 y 2019, con un récord de recaudación en 2016, cuando la factura superó los 172 millones. Y, a pesar de que el uso del 901 ya es prácticamente residual, ha seguido recaudando 20.000 euros en los dos últimos ejercicios tras un acusado desplome a partir de los dos millones de 2017.