El PP denuncia "el estado de abandono" de la Villa romana de Ilíberis "convertida en un campo de matorrales"

El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Granada ha denunciado "el absoluto estado de abandono" de los terrenos que aguardan la Villa Romana de Ilíberis situada en la Plaza Rafael Guillén, en el barrio del Zaidín.

La subida de las temperaturas que vive estos días la ciudad ha provocado la proliferación de plantas convirtiendo la excavación "en un auténtico campo de matorrales y rastrojos". Así lo ha denunciado la concejal del grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Granada Inmaculada Puche, quien asegura que el alcalde de Granada, Francisco Cuenca, se ha olvidado de la “joya arqueológica” que esconden estos terrenos.

“El equipo de Gobierno socialista ha manifestado en numerosas ocasiones su intención de retomar estos trabajos para la construcción del parque. Sin embargo, “tres meses después desde que se tapó la excavación, los terrenos siguen igual o peor”, ha manifestado Puche, quien ha recordado la falta de seguridad que marcó las catas el pasado verano. “Un grupo de jóvenes se intentó llevar parte de una columna”, ha detallado Puche.

Los trabajos comenzaron el pasado verano dentro del proyecto dentro de la línea de actuación ‘Regeneración integrada de espacios abandonados’, dotada a nivel global con un presupuesto de más de un millón de euros dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi) de Granada ‘De tradición a innovación’.

Muy pronto el equipo que trabajaba en los terrenos descubrió que el perímetro y el valor de la Villa Romana era mucho mayor al esperado. por lo que se decidió tapar los restos para redactar un nuevo proyecto que permitiera una segunda excavación. El pasado mes de noviembre, el alcalde de Granada, Francisco Cuenca, visitó la zona y aseguró que ese mismo mes se retomarían los trabajos.

Sin embargo, “estamos acabando febrero y los trabajos no han comenzado”, ha añadido Puche quien considera que, con esta visita a la Villa, el alcalde repitió su estrategia habitual de puro marketing: “Acude a los barrios para atender, presuntamente, las demandas de los vecinos. Se hace la foto y no vuelve más”.

Ante esta situación, la edil ha exigido a Cuenca que se tome en serio a los ciudadanos de Granada y abandone su “particular ruta de las promesas” tras tres años de “paseos por los distritos para lanzar compromisos que nunca llega a cumplir o que llegan demasiado tarde”.