El 'Día de la Marmota' de Matthieu Saunier
El francés ha vivido un inicio de temporada complicado, al igual que el del curso pasado | Desde la grada ha esperado su oportunidad para reconciliarse con su mejor versión
Matthieu Saunier llegaba al Granada CF libre y procedente del Troyes francés. Su fichaje coincidió con la salida de Babín. La sombra que dejaba el de Martinica no era fácil de cubrir, por lo que el francés ya empezó algo condicionado de cara a la mirada de los más críticos. A esto, hay que sumarle que era el séptimo fichaje del verano y llegaba tras ilusionantes incorporaciones como la de Boga, Toral u Ochoa.
Ese inicio de liga fue complicado, muy parecido al de esta temporada. Cuando llegó al Granada, Paco Jémez lo descartó rápidamente. No contaba para el técnico que pretendía revolucionar el conjunto rojiblanco.
No debutó hasta la jornada diez, cuando su mirada ya estaba fijada en el mercado de invierno. Se jugaba contra todo un Barcelona y, además, en el Camp Nou. Saunier fue el primer ‘fichaje’ de la nueva era Alcaraz. Hasta la fecha no había tenido una oportunidad. Con el míster granadino tuvo más o menos continuidad. La llegada de Tony Adams fue de nuevo su verduga, jugó un partido más completo y fue doblegado al banquillo. Gastón Silva, Lombán, Vezo e incluso Ingason jugaron más que el francés. Sólo, Hongla estuvo por debajo en cuanto a minutos jugados.
Otro inicio turbio
En el inicio de esta etapa en Segunda, Saunier pareció vivir en el ‘Día de la Marmota’. Tampoco ha contado en exceso para José Luis Oltra, hasta que hubo carencias en la zaga. Germán y Menosse parecían los titulares indiscutibles para este proyecto, diseñado con escuadra y cartabón para ascender a la élite.
Durante cinco jornadas, el francés ha visto desde la grada cómo sus compañeros se llevaban la titularidad. Menosse, Germán, Charlei Dean y Hongla han partido como favoritos por delante del central de Hyères. Pero, a partir de la sexta cita, la ventura se ha puesto de su favor.
Dos partidos jugados ante Córdoba y Alcorcón, con actuaciones más que decentes, han coincidido con el regreso de Saunier. Además, fue pieza clave en Santo Domingo. Provocó el penalti con el que su equipo empezó perdiendo en Madrid, pero supo rearmarse con el tanto que les daba a los rojiblancos los tres puntos y el fin a una mala racha, que parecía eterna, lejos de la ciudad de la Alhambra.
Y es que, aunque anecdótico, el Granada ha sumado durante las cinco primera jornadas ligueras cuatro empates y una derrota, con siete goles en contra. Con Saunier, se han encajado dos goles, se han acumulado dos victorias y, además, es el único central de la plantilla que, por ahora, ha conseguido un tanto.
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