Decretan prisión provisional comunicada y sin fianza para el detenido por la muerte del guardia civil

Está investigado por los delitos de homicidio, atentado, tenencia ilícita de armas y robo y uso de vehículo a motor

fotonoticia_20181018131414_1920
Los compañeros del guardia civil asesinado en Granada este pasado lunes transportan el féreto hasta la Catedral, lugar donde se celebró la misa funeral | Álex Cámara
EP
0

El Juzgado de Instrucción número 8 de Granada, este jueves en funciones de guardia, ha acordado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para el presunto autor del disparo que acabó con la vida del guardia civil José Manuel Arcos Sánchez en la madrugada del pasado lunes después de que le diera el alto en Huétor Vega (Granada).

El detenido, que prestó declaración ante el juez de Guardia, está investigado por los delitos de homicidio, atentado, tenencia ilícita de armas y robo y uso de vehículo a motor, según informan desde el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (Granada).

El Juzgado de guardia se ha inhibido a favor del Juzgado de Instrucción número 5, que será el encargado de llevar la investigación judicial.

El presunto homicida es un hombre de 40 años con un amplio historial delictivo que fue arrestado horas después del disparo contra el agente en la rotonda junto al centro comercial Serrallo Plaza, en la capital, cuando conducía una furgoneta robada con la que trataba de escapar del cerco policial.

Los hechos ocurrieron sobre las 4,20 horas del lunes en Huétor Vega, donde el agente interceptó un turismo que circulaba a gran velocidad y al identificar al único ocupante se produjo un forcejeo entre ambos. El conductor arrebató el arma reglamentaria al agente, le disparó y logró huir.

El operativo para dar con él comenzó en torno a las 5,00 horas y conllevó el "cierre" y rastreo de las vías de comunicación en buena parte del área metropolitana de Granada. Su arresto se produjo en torno a las 9,30 horas.

Supuestamente acababa de cometer un robo en Las Gabias (Granada) cuando el guardia civil le dio el alto en la localidad de Huétor Vega, donde se encontraba patrullando junto a una compañera en prácticas a la que también disparó, aunque no logró alcanzarla. Abandonó en la zona una mochila con un subfusil cargado y el botín de ese robo.

El agente herido fue evacuado al Hospital de Campus de la Salud en estado grave, donde fue sometido a una operación quirúrgica, pero finalmente no pudo salvar la vida. Familiares, autoridades y compañeros le dieron el pasado martes el último adiós en la misa funeral celebrada en la catedral de Granada y a la que asistió el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska.

Previamente se le condecoró a título póstumo con la Cruz de la Orden del Mérito de la Guardia Civil con distintivo rojo en la Comandancia de Granada, donde se instaló la capilla ardiente.







Se el primero en comentar

Deja un comentario