El Covirán Granada, entre los mejores arranques ligueros de los recién ascendidos

La derrota del pasado sábado ante el Gran Canaria no puede empañar el gran arranque de Covirán Granada en su estreno en la ACB. El conjunto rojinegro encara esta sexta jornada de la competición con un balance de tres victorias y dos derrotas, unos números que lo posicionan entre los mejores inicios de temporada de un recién ascendido de los últimos cinco años y, sobre todo, unos datos que, según años anteriores, son muy positivos para conseguir la ansiada permanencia.

Contando desde la temporada 2017-2018, un total de siete equipos, sin contar a Covirán Granada ni Girona, han logrado su entrada en la Liga Endesa. Hay que tener en cuenta que en la temporada 20/21 solo ascendió Guipuzkoa, ya que Valladolid, el otro equipo con opción a subir de categoría no pudo hacer frente a la cuantía económica necesaria para entrar en ACB. Además, en la 21/22, esta plaza solo la obtuvo Breogán por el cambio de formato de la LEB Oro.

Retrocediendo hasta la campaña 17/18, los equipos que consiguieron entrar en la ACB fueron Guipuzkoa y Burgos. El conjunto vasco cerró sus primeras cinco jornadas en la máxima competición del baloncesto español con dos victorias y tres derrotas, mientras que los burgaleses no lograron ningún triunfo en sus primeros cinco encuentros. Al acabar la temporada, ambos equipos finalizaron con 13 victorias y 21 derrotas, cifras que les permitieron cerrar la temporada en los puestos 13º y 14º respectivamente. Por lo tanto, salvados.

El caso de Burgos se podría considerar una excepción, ya que analizando las siguientes campañas, aquellos equipos que conseguían menos de dos victorias en el arranque liguero acabaron regresando el siguiente año a la LEB Oro. Este es el caso de Breogán en la temporada 18-19. El equipo dirigido por aquel entonces por Tito Díaz tan solo consiguió un triunfo en sus cinco primeros partidos. Acabó descendiendo con 9 victorias y 25 derrotas. Aquel año también entró en ACB Manresa, equipo con firmó un 2/3 de balance, pero que logró reaccionar a lo largo de la temporada para acabar octavo con 17 victorias y 17 derrotas.

El curso baloncestístico 19/20 fue algo convulso. Cabe recordar la pandemia del coronavirus obligó a cortar las competiciones en seco y que la Liga Endesa se resolvió con una Fase Final Excepcional celebrada en Valencia. Aquel año, el cartel de novatos colgaba sobre Betis y Bilbao. Los sevillanos, que en el momento del ascenso contaban con Thomas Bropleh y Lluís Costa en sus filas, arrancaron la temporada con una sola victoria y cuatro derrotas y acabaron el curso con 8 triunfos y 15 derrotas. Unos números que, si no llega a ser por la irrupción del Covid-19, lo más probable es que los hubiese avocado al descenso. Por su parte, Bilbao firmó los mismos números que cosecha en la actualidad Covirán Granada, tres victorias y dos derrotas. Con el corte de la campaña, los vascos contaban con un balance tan positivo que les permitió disputar aquella Fase Final Extraordinaria de Valencia. 

Con la llegada de la temporada 20-21 y el intento de regresar a la normalidad, Guipuzkua luchó hasta el último momento para conseguir su plaza en la Liga Endesa. Los vascos cerraron las primeras cinco jornadas con tan solo un triunfo y cuatro victorias, resultados que supusieron un primer avance de lo que ocurriría al final del año. Un balance de 7/29 y descenso. 

La última referencia que tiene el Covirán Granada es la Río Breogán. Los gallegos entraron en la máxima categoría del baloncesto español como una apisonadora y es por todos conocidos la gran campaña de estreno que firmó el conjunto dirigido por Veljko Mrsic. Participación en la Copa del Rey y undécimos en la clasificación general con 16 victorias y 18 derrotas. Sus primeros encuentros se saldaron de la misma forma que lo ha hecho el conjunto rojinegro. Tres triunfos y dos derrotas. Por lo tanto y siguiendo un poco la historia de la competición, los de Pablo Pin marchan, de momento, por el buen camino.