Los constructores, en alerta por los suministros: "Es como estar en la bolsa, no sabemos cuánto van a subir los precios"

La crisis de suministros sigue afectando a los diferentes sectores del comercio granadino y español. El ámbito de la construcción tampoco se ha librado de esta escalada de los precios que se lleva sucediendo desde mediados de 2021. El incremento del IPC ha derivado en una inflación que ha terminado por explotar con la invasión rusa de Ucrania.

"Hay mucha incertidumbre", cuenta Francisco Martínez Cañavate, portavoz de la Asociación de Constructores y Promotores de Granada. "No sabemos si aún estamos viendo la punta del iceberg o ya lo vemos entero", asegura en referencia a la subida de los precios en los últimos meses.

La inflación ya se sitúa en el 7%, por lo que se vuelve muy complicado cuadrar los precios de materias primas, transporte y mano de obra con el producto final que se entrega al comprador. "Ahora mismo el gasoil está a casi 2€ el litro (en Granada), pero será peor si en seis meses cuesta 3€. Debemos ver las cosas con perspectiva, no sabemos si seguirá escalando, pero sí parece que hay precios que han llegado para quedarse", explica.

Martínez Cañavate explica que hay tres lecturas diferentes de esta crisis, según el sector específico de la construcción en la que se centre. "Para las obras públicas se ha puesto en marcha un Decreto Ley que revise los precios a los estándares de 2021, pero es insuficiente. Son pocas las obras que se pueden circunscribir a este Decreto". El ámbito privado, puntualiza, no se maneja en ese baremo. "Se están produciendo renegociaciones entre las promotoras, las constructoras y los suministradores de material", comenta.

Ese punto exactamente, el de la materia prima, es el que está generando una mayor incertidumbre entre las constructoras y promotoras. "Hay fábricas que han parado el suministro, incluso que se han puesto en ERTE, por la subida de las energías", asegura José Luis Jiménez, subdirector de Añil Construcciones, perteneciente a Aconser Grupo Empresarial.

Algunas fábricas de materiales importantes han cortado sus suministros. "Elementos como metales, acero, aluminio o cobre han sufrido una subida sustancial en el precio, que además ha empeorado con la guerra", comenta. Asegura que los presupuestos no se garantizan en el tiempo y que se tienen que revisar casi diariamente.

"Estamos como en la bolsa, cada día el precio es una incógnita y no sabemos si se quedará así o volverá a subir", explica Jiménez, que, además, desglosa cómo ha cambiado la operativa económica con los proveedores: "Por ejemplo, antes cerrábamos los presupuestos para los suministros de materiales para toda la obra y eran los mismos independientemente de la cantidad de pedidos que hiciéramos. Ahora los presupuestos se renegocian prácticamente con cada pedido en función de cómo esté la situación y los precios".

A pesar de que la situación actualmente es bastante tensa, no creen que se produzca una suspensión o paralización inmediata de las obras ya comenzadas. "No es fácil parar una promoción que ya está iniciada, se hará todo lo posible por continuar con ella. Sí que puede haber obras que no estén iniciadas y que se pospongan, sería la decisión más prudente", puntualizan desde la Asociación de Constructores y Promotores.

Jiménez, de Añil Construcciones, pone el acento también sobre el objetivo final a nivel privado, que en la mayoría de ocasiones es el de vender una vivienda: "El promotor tiene mucha actitud y quiere ejecutar las viviendas, pero hay que tener en cuenta también que esta subida de precios repercuta de la manera más moderada posible en el comprador final de la vivienda".

Sin embargo, en lo que sí coinciden ambos, es en la incertidumbre que se queda en el mercado de materias primas de cara a las próximas semanas. Irá en función, en su mayoría, de lo que se alargue la guerra en el este de Europa. "Es complicado que la subida de precios que han tenido materiales como el aluminio, el acero o el vidrio vuelva atrás en el mismo porcentaje. Se espera que se moderen, porque ha sido un encarecimiento sustancial, pero también hay suspicacia de que esto no suceda", asevera Jiménez.

Además, otro de los puntos a tener en cuenta ahora mismo en el sector es la huelga en el transporte. Las obras no se están parando por la subida del precio de los suministros ni las materias primas, pero sí que lo hacen debido a la ausencia de transportistas y conductores. Añil Construcciones ha tenido que paralizar varias obras debido a que los cargamentos de materiales no llegan, por lo que la situación sigue escalando por otros lugares.