Cinco claves sobre lo que está sucediendo en Ceuta

La crisis migratoria entre Marruecos y España provoca dudas sobre el origen del conflicto ni qué se hará desde ahora con estas 8.000 personas

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El Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil rescata a una niña que ha llegado a la playa del Benzú, en Ceuta | Foto: Antonio Sempere / Europa Press
Rosa Núñez
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Desde hace días no cesan de llegar noticias sobre la llegada de casi 8.000 inmigrantes a Ceuta desde Marruecos. Nunca antes se había visto una entrada irregular tan masiva de extranjeros en otro país en tan poco tiempo. De esta manera, esta situación ha derivado en una crisis migratoria, que además se ha convertido en una crisis política y diplomática entre Marruecos y España, llegando incluso a afectar a la Unión Europea (UE). Tanto es así que el presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, suspendió su agenda institucional del pasado martes y viajó hasta las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

Es reseñable que de las cerca de 8.000 personas que se adentraron en Ceuta desde el pasado lunes, más de la mitad ya han sido devueltas a Marruecos, según ha informado el Ministerio de Interior, que no está dando muchos más detalles del procedimiento y la situación del retorno de esas personas a su país. Sin embargo, estas no son las únicas preguntas que pueden surgir a partir de este conflicto, ya que no se sabe con certeza el origen del mismo ni qué se hará desde ahora con las miles de personas que han entrado al territorio español, entre los que destaca la presencia de cientos de menores. Para todas las dudas que puedan asaltar al lector en este punto, se va a hacer un recorrido por las claves de qué está pasando exactamente en Ceuta en estos momentos.

1. ¿Cuándo empezó todo?

Ya desde el pasado domingo se comenzaron a escuchar rumores sobre relajación de los controles en la frontera entre Marruecos y Ceuta, sobre todo en la costa. De repente, durante la madrugada del domingo al lunes, cientos de marroquíes se acercaron a los espigones que separan la ciudad autónoma del país africano para bordearlos, bien a nado o a pie. Las fuerzas de seguridad marroquíes no parecieron preocuparse en ese momento, como de costumbre. Así, el martes ya había casi 8.000 inmigrantes en Ceuta, la mayoría marroquíes, pero otros muchos procedentes de la zona sur del Sáhara. Durante ese día y el pasado miércoles continuaron entrando, aunque ya en menor medida. Según el Gobierno de Ceuta, la mayoría de estas personas son hombres jóvenes, pero también han llegado familias enteras, muchas de ellas con niños, algunos muy pequeños, como se aprecia en la imagen que, en las últimas horas, se ha hecho viral del agente de la Guardia Civil rescatando a un bebé en el mar, cerca de la costa ceutí.

Juan Francisco, el agente de la Guardia Civil que ha rescatado al bebé en la frontera de Ceuta | Foto: Europa Press

2. ¿Cómo empezó todo?

Aparentemente, el desencadenante de este conflicto internacional fue la atención hospitalaria por Covid-19 del líder del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Brahim Gali, de 73 años, por parte de España en un hospital de Logroño. Este hecho cabreó al Gobierno de Marruecos, por lo que, en teoría, el pasotismo de los agentes de seguridad en la frontera entre ambos países fue un supuesto castigo al Gobierno español. No obstante, desde hace meses, la capital marroquí, Rabat, está ejerciendo una presión sobre España e incluso sobre la UE para que “abandonen la zona de confort” de la ONU, en palabras de las autoridades marroquíes, después de que el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, reconociera la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental.

3. ¿Cuáles han sido las reacciones de las distintas instituciones?

El Gobierno de España se ha volcado desde el principio en resolver esta crisis migratoria, convirtiéndose en la mayor urgencia de la agenda del Ejecutivo ahora mismo y la peor crisis política desde la llegada de Sánchez a la presidencia. El presidente movilizó al Ejército hasta Ceuta el pasado lunes y ha mantenido un estrecho contacto con el rey Felipe VI y con Pablo Casado, el líder de la oposición.

Por otro lado, el Gobierno de Marruecos ni siquiera se ha pronunciado sobre el asunto y la única representante del mismo que se ha manifestado ha sido la embajadora en España, Karima Benyaich, quien afirmó este martes que “hay actos que tienen consecuencias y se tienen que asumir”, refiriéndose aparentemente a la acogida de Gali por parte de España.

Por su parte, la Unión Europea ha recriminado a Marruecos su papel durante esta crisis migratoria "sin precedentes". La comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, advirtió que "las fronteras españolas son las fronteras europeas". La responsable de los asuntos fronterizos y del nuevo pacto migratorio de la UE ha exigido a Marruecos el cumplimiento de los controles en los movimientos irregulares de ciudadanos y que asegure que aquellos “que no tienen derecho a quedarse sean devueltos de forma ordenada y efectiva”.

4. ¿Qué va a pasar ahora con las personas que han llegado a España?

El objetivo del Gobierno de España es devolver al mayor número de estos inmigrantes a su país, y lo más rápido posible, a lo que Marruecos, obviamente, no se ha opuesto. Según el Ministerio de Interior, desde el lunes, cerca de 4.000 personas han vuelto a África. El gabinete de Fernando Grande-Marlaska no ha dado detalles del procedimiento que se está siguiendo para este hecho. Los menores que han cruzado la frontera estos días no tendrían que ser devueltos, ya que, ante todo, prima el interés del menor. Según aseguró el ministro del Interior, ninguna de las personas que ya han sido devueltas es menor

5. ¿Alguna vez ha pasado algo parecido?

No. Se trata de una crisis "sin precedentes", como indicaba la propia Ylva Johansson, ya que es la primera vez que tantas personas cruzan una frontera entre dos países de forma irregular en tan poco tiempo. Es por eso que Ceuta, una ciudad de menos de 20 kilómetros cuadrados, se ha visto desbordada ante esta situación, ya que, aunque se han habilitado varios espacios para acoger a todos estos ciudadanos, no son suficientes. Los menores, en torno a 1.500, llevan varios días en una nave del Tarajal y aún hay recintos que no están en funcionamiento, como el estadio José Benoliel, aunque ya se están habilitando y se comenzarán a utilizar en los próximos días.







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