Millones de etíopes viven una nueva crisis alimentaria debido a la fuerte sequía

El coordinador humanitario de la Misión de Asistencia de Naciones Unidas para Somalia, Peter de Clercq, ha advertido de que existe riesgo significativo de que la situación continúe deteriorándose hasta producirse una hambruna

pobreza-etiopia
Foto: archivo
E.P.
0

Millones de ciudadanos de Etiopía se enfrentan a una segunda crisis humanitaria debido a la fuerte sequía en la zona del África subsahariana, según ha denunciado este martes Naciones Unidas, que ha alertado de que la organización necesita más de 900 millones de dólares (840 millones de euros) para prestar la ayuda necesaria en la región.

La asistencia ofrecida el año pasado a las poblaciones afectadas por la sequía del río Nilo redujo a unos 5,6 millones el número de etíopes que se encontraban en riesgo de pasar hambre. Sin embargo, la escasez de lluvias ha puesto de nuevo en peligro a la población del país.

"El año pasado logramos poner en marcha la mayor operación de la historia contra la sequía", ha manifestado a través de un comunicado el presidente de la Comisión Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, Mitiku Kassa.

"Ahora necesitamos contar con la colaboración necesaria para enfrentarnos a la sequía", ha añadido Kassa, que ha solicitado una cantidad muy similar a la que han pedido los gobiernos de Kenia y Somalia, también afectados por la falta de lluvias.

El coordinador humanitario de la Misión de Asistencia de Naciones Unidas para Somalia, Peter de Clercq, ha advertido de que existe "un riesgo significativo de que la situación continúe deteriorándose hasta producirse una hambruna" y ha afirmado que se necesitan 864 millones de dólares (807 millones de euros) para paliar la situación de 3,9 millones de somalíes.

A diferencia del año pasado, cuando la sequía afectó a la población en el norte del país, este año las comunidades más afectadas se encuentran en el sur. "Se espera que el impacto sobre los medios de vida de los ciudadanos sea mayor en 2017. Se podría producir un aumento de la hambruna y la mortalidad", ha comunicado la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Los países del este y el sur de África sufrieron en 2016 las duras consecuencias de las sequías, que frenaron el crecimiento económico y provocaron un aumento de la inflación, así como la pérdida de las cosechas. En el caso de Etiopía, donde ocho de cada diez personas dependen de la agricultura para subsistir, esta fue la peor sequía de los últimos 50 años.

Muchas familias continúan pagando los préstamos que solicitaron el año pasado para hacer frente a la situación, según ha alertado la FAO, que ha indicado que otras se encuentran en una situación de absoluta vulnerabilidad dado que no han podido recuperar sus rebaños.

"Las consecuencias de la sequía el año pasado durante las estaciones más críticas han renovado los riesgos, especialmente para las comunidades que se apoyan en el pastoreo", ha asegurado la organización.

La portavoz de Naciones Unidas Choice Ufuoma Okoro ha destacado que al menos 18 millones de etíopes recibieron en 2016 unos 1.700 millones de dólares (1.500 millones de euros) en ayudas, de los cuales la mitad procedían del Gobierno.







Se el primero en comentar

Deja un comentario