Más de 100 expertos europeos en la atmósfera terrestre participan en un encuentro científico en Granada
Los reunidos debatirán sobre el estudio de la atmósfera terrestre mediante el empleo de diversas técnicas como la teledetección, las observaciones in-situ y el empleo de modelos de atmósfera
La 3ª Asamblea General del Proyecto Europeo ACTRIS2 (Aerosol, Clouds, and Trace Gases ResearchInfrastructure) reúne esta semana en Granada, en el Instituto Interuniversitario de Investigación del Sistema Tierra (IISTA), a más de 100 investigadores, procedentes de más de 50 instituciones europeas.
Todos ellos debatirán hasta el 3 de febrero sobre el estudio de la atmósfera terrestre mediante el empleo de diversas técnicas, que incluyen la teledetección, las observaciones in-situ y el empleo de modelos de atmósfera.
Además de la presentación del informe intermedio del proyecto ante los evaluadores de la Unión Europea, los días 1 y 2 de febrero se celebrarán sesiones científicas sobre los avances realizados en el Parque de las Ciencias. También tendrán lugar sesiones informativas sobre la reciente inclusión de ACTRIS en la hoja de ruta del Foro Estratégico Europeo para Infraestructuras de Investigación (ESFRI) como infraestructura potencialmente operativa en un plazo inferior a 10 años y sostenible a largo plazo.
La reunión se celebrará en la sede del IISTA del Centro Andaluz de Medio Ambiente (CEAMA), donde el Grupo de Física de la Atmósfera opera una variada instrumentación orientada a la caracterización de las propiedades físicas y químicas de las partículas atmosféricas. Las sesiones científicas abiertas se presentarán en el Parque de las Ciencias.
El Grupo de Física de la Atmósfera de la Universidad de Granada (GFAT) actúa como anfitrión de la citada reunión. Su intensa actividad en el campo de los estudios atmosféricos le ha llevado a involucrarse en diversas redes globales de observación de la calidad del aire. Así, junto a la citada red ACTRIS, el grupo participa activamente en la Infraestructura de Investigación Europea, ERIC, ICOS (Integrated Carbon Observation System) y en la red AERONET (AEROSOL ROBOTIC NETWORK) coordinada por la NASA.
Ocho son las instituciones españolas que han participado y participan en ACTRIS: la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), el Instituto Interuniversitario de Investigación del Sistema Tierra en Andalucía (IISTA-CEAMA) de la Universidad de Granada (UGR), el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el Barcelona Supercomputing Center – Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS), el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), el Instituto Nacional de Técnica Aerospacial (INTA), la Universidad de Valladolid (UVA) y la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC). Actualmente se está consolidando la parte española de la infraestructura, con una extensión de las instituciones participantes a la Universidad de Valencia, a la Universidad Miguel Hernández de Elche y al Centro de Estudios Ambientales de Mediterráneo de Valencia.
ACTRIS (Aerosol, Clouds, and Trace Gases ResearchInfrastructure)
ACTRIS (Aerosol, Clouds, and Trace Gases ResearchInfrastructure) es una infraestructura de investigación atmosférica distribuida sobre el continente europeo, cuya misión es facilitar el estudio de la distribución espacio-temporal y las propiedades e interacciones de constituyentes atmosféricos de vida corta. Se centra en el estudio de componentes atmosféricos con gran impacto sobre la calidad del aire, la meteorología y el clima, tal y como son los aerosoles, nubes y gases traza. Estos componentes tienen una vida media corta en la atmósfera (entre horas y meses) y presentan una distribución no homogénea. Además, se trata de componentes que interaccionan mediante procesos que aún requieren mayor estudio. Todo ello dificulta la evaluación cuantitativa de sus efectos tanto a nivel local como global y exige la implementación de redes distribuidas como ACTRIS, en las que se incluyan las técnicas más avanzadas de observación atmosférica.
ACTRIS tiene como objetivo final el contribuir de manera relevante al conocimiento de procesos meteorológicos y a la evaluación de tendencias climáticas, la caracterización de fenómenos de transporte de polvo mineral y de contaminantes a media y gran distancia, y el aporte de información que ayude en la toma de decisiones para mejorar la salud humana, y de los seres vivos en general, mediante una mejora en la calidad del aire.
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