La Virgen del Rosario cerró un día de fiestas (galería)

La Copatrona de Granada procesionó por el Realejo, barrio que se volcó con ‘su Reina’, que puso colofón al Día del Pilar y de la Hispanidad en Granada

La Virgen del Rosario en la plaza de Santo Domingo | Foto: Román Callejón
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Ayer día 12 de octubre fue una gran jornada en las calles de Granada. No solo fue la celebración de la fiesta nacional, del día del Pilar y el Día de la Hispanidad, cuya magnitud en la ciudad donde están enterrados los Reyes Católicos es de especial calado por este hecho, sino que también procesionó la Copatrona de la urbe.

Desde el barrio del Realejo, en la Iglesia de Santo Domingo, pone su andar en la calle la Santísima Virgen del Rosario Coronada, una imagen vestida de plata, que comparte patronato de la ciudad con la Viren de las Angustias.

El Realejo respondió a ‘su Reina’ y en un día como el de ayer olvidó la pugna por hacerse con este título que llevan a cabo otras dolorosas de vestir como la Amargura, la Victoria o la Misericordia, o la homónima de la patrona, la Virgen del Rosario que acompaña a Tres Caídas.

Ayer, todo el barrio estuvo con la ‘Patrona y Capitana’, según lucían las pancartas con la bandera de España. Ayer, el Realejó fue uno bajo el manto de plata de la Virgen del Rosario, que a las 18:00 horas salía a pasear por Granada.

Una vuelta por la ciudad que bajaba por San Matías hasta Ganivet y volvía a Pavaneras no sin antes pasar por el ayuntamiento y la fuente de Colón. Nunca estuvo sola la Señora del Rosario, guiada por el capataz Alberto Ortega, sino que siempre el público hizo el pasillo para acompañarla hasta su multitudinario encierro.

Unas sevillanas rocieras y un castillo de fuegos artificiales recibieron a la Virgen del Rosario en su llegada al templo de Santo Domingo, a las 22:00 horas exactas. Así, la Copatrona de Granada puso el broche final a un día que tuvo varios actos de celebración por las diferentes fiestas que congregó.







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