IU exige a la consejería de educación que demuestre que respeta la cultura y abra la biblioteca de Las Palomas en el Zaidín

La diputada en el Parlamento Andaluz, Mari Carmen Pérez, reclamó en enero a la Junta un convenio que garantizase la estabilidad y normal funcionamiento del centro Las Palomas.

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La concejala de IU en el Ayuntamiento de Granada, Maite Molina, ha exigido a la Consejería de Educación, Cultura y Deportes "que reabra la biblioteca de las palomas en el barrio granadino del Zaidín ante la situación de desamparo que están viviendo los vecinos del barrio con respecto al cierre hace tres años por el PP de la biblioteca, y que este viernes van a seguir con su justa reivindicación, porque lo que no ha conseguido el equipo popular, es paralizar su lucha tras la cesión del inmueble a la Junta de Andalucía, y no es de recibo que la Consejería de Educación, como parte de un gobierno que se dice progresista, no sea capaz de dar la respuesta a la plataforma, al igual que el PP granadino"

Molina señala que “en este sentido nuestra diputada de IULV-CA en el Parlamento andaluz, Mari Carmen Pérez, reclamó en el  mes de enero a la Junta de Andalucía, la firma de un convenio que garantice la estabilidad, y el normal funcionamiento del centro de Las Palomas, criticando el abandono al que las administraciones han sometido a los vecinos del Zaidín, y al no obtener respuesta alguna, ha vuelto a solicitar por escrito con fecha de 31 de julio una explicación a la Consejería de Educación”

Según informa la edil de Izquierda Unida “se ha trasladado al Parlamento Andaluz un par de preguntas para que sean contestadas por escrito, en las que por una parte, se pide respuesta sobre los motivos que impiden que la Consejería, llegue a un acuerdo con la plataforma en defensa de la reapertura de la biblioteca de las palomas, y por otro a la exigencia de la firma de un convenio con la misma, para devolver al barrio un espacio cultural y educativo de tan importante función social, que ha dejado abandonado a 20.000 usuarios en el Zaidín”

Maite Molina defiende “la voluntad de la Plataforma para la reapertura de la Biblioteca, que sigue autogestionando el edificio con sus integrantes de modo altruista, pero ha pedido que no se abuse de la buena disposición de los vecinos, y se les cargue a ellos con las funciones que deberían estar cubriendo las administraciones, ya que no se puede garantizar el buen funcionamiento de la Biblioteca, no por la incapacidad de los vecinos para su gestión sino por las evidentes problemáticas que se derivan del mantenimiento de un edificio de estas características”

Molina insiste en que a su organización les consta que “el edificio sufre problemas con el suministro de agua, y de luz,, por lo que es del todo legítimo que los vecinos exijan a las administraciones el mantenimiento del servicio”

Desde IU destacan que “no es de recibo que el PP acabara con esta biblioteca de barrio bajo una falsa excusa de la apertura de la biblioteca Francisco Ayala, como siempre hemos denunciado una ciudad culta no se caracteriza por el cierre de bibliotecas sino al contrario, por suplir las carencias existentes, que mantienen a Granada con un déficit de 6 bibliotecas, en razón a los habitantes de la ciudad, pero tampoco lo es que una Consejería que se dice de izquierdas, mantenga oídos sordos a las reclamaciones vecinales, y no de la cobertura necesaria para que las palomas vuelva a abrir sus puertas con profesionales bibliotecarios, no supone tanto coste para las arcas andaluzas y devolvería la educación y la cultura, a un barrio al que la derecha se la ha arrancado, debemos demostrar que somos diferentes, y exigimos que Educación esté a la altura de lo que se espera de su gobierno”

Por último la edil izquierdista señala que “los vecinos se quejan de la nula disposición al diálogo por parte del Ayuntamiento de Granada, desde que cerrara la Biblioteca en agosto de 2011, y de que, después de tres encuentros con la Junta, sigan sin obtener la respuesta esperada, además de denunciar la precariedad de recursos con la que han estado trabajando, durante el año que la han tenido parcialmente abierta”







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