Histrión Teatro presenta el estreno absoluto de La Isla, un espectáculo que hurga en el dolor con la fuerza del teatro

El texto, escrito por Juan Carlos Rubio expresamente para la compañía, aborda con una intensidad arrebatadora y de manera necesaria el dolor de vivir

la isla
Gabinete
0

“¿Por qué siempre ves lo que yo no veo?”, cuestiona en escena uno de los personajes. Tal vez porque el teatro es ese lugar maravilloso para ver todo eso que no vemos o que no queremos ver, lo que deseamos y no nos atrevemos a confesar, lo que fingimos u ocultamos. Todo eso que no nos perdonamos, de lo que no podemos huir y que está enmascarado en culpas, juicios, acaso sueños: el dolor que se instala en nuestras vidas, y en el que La Isla hurga con la fuerza del teatro.

Histrión Teatro presenta en Granada el estreno absoluto de La Isla, un texto lleno de placer teatral, no exento de ironía, tan estremecedor como lleno de verdad y poesía, que el dramaturgo andaluz Juan Carlos Rubio ha dirigido y ha escrito expresamente para la compañía en un tour de force de 80 minutos interpretado por Gema Matarranz y Marta Megías. Un espectáculo que podría ser una de las propuestas más arriesgadas de esta temporada en el panorama teatral español y que podrá verse el 8 y 9 de febrero a las 21h. en el Teatro Alhambra para después iniciar una gira por España.

La Isla se presenta como un montaje que explora con gran sutileza esa delgada línea que separa lo que sentimos de lo que podemos reconocer que sentimos frente a los demás y frente a nosotros mismos, de asumir lo que nos sucede. De asumirnos. Y lo hace como si fuera una historia compartida a través de dos personajes tan frágiles como llenos de fuerza y profundidad. Ada y Laura se enfrentan esta noche al dolor, a un dolor profundo, a veces, inconfesable, que se ha apoderado de sus vidas y las ha convencido de que no hay posibilidad alguna de escape. O quizá sí. “Reconocerlo abiertamente puede llevarlas a un rincón demasiado oscuro y solitario. Ese oscuro rincón llamado conciencia”, explica Juan Carlos Rubio.

“La sociedad nos ha ido domesticando a la hora de expresar el dolor, aleccionándonos para cumplir con lo políticamente correcto, para incluso durante las más terribles desgracias asumir el papel a medida que nos han escrito las normas de convivencia. Pero, ¿qué sucede cuando sentimos lo que no se debe sentir, lo que no se puede sentir? ¿Qué sucede cuando el dolor nos sobrepasa y queremos huir de él? ¿Nos convertimos en depredadores, conectamos con el lado más salvaje de nuestra naturaleza, con ese animal cargado de instintos primarios que somos? ¿Deseamos sobrevivir a cualquier precio?”, expresa el autor y director en ésta su tercera colaboración con Histrión, después de la escritura y dirección de Arizona y Lorca, la correspondencia personal. “Teníamos muchas ganas de volver a trabajar nuevamente con él, es un hombre de teatro que nos llena de luz, de realidad, de fuerza, y se genera un vínculo de cariño especial que nos une cuando trabajamos juntos”, afirma la actriz y cofundadora de Histrión Gema Matarranz, que asegura que La Isla es “uno de los espectáculos más difíciles, crudos, que deja el cuerpo hecho trizas, emocionante… Hermoso, valiente. Necesario”.

Quizá por eso al espectador, al que no dejará indemne, pero al que Juan Carlos Rubio da tregua a través de guiños y efectos de distanciamiento, sólo le queda rendirse. “Rendirse para mirarse dentro, para mirarnos”, comenta la actriz Marta Megías. “La realidad se nos escapa de las manos y no podemos agacharnos a recogerla”, como dice el texto.

La Isla es también un montaje que alberga el tabú de desear la muerte de alguien a quien se quiere. Un tema necesario, y un lugar adecuado para hacerlo: el teatro. Porque no estamos preparados para el dolor, pero el dolor está ahí... “No os espante el dolor. O tendrá fin o acabará con vosotros”, afirmaba Séneca. Por eso La Isla habla con una fuerza arrebatadora del dolor de vivir, del dolor de estar muerto en vida y también del amor al teatro y a esa misma vida, la nuestra. “A fin de cuentas, todos somos una isla rodeada de agua y soledad”, expresa Juan Carlos Rubio.

La Isla es una producción de Histrión Teatro, formación teatral concertada con el INAEM, que cuenta con la colaboración de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Albolote, donde Histrión es compañía residente. Está interpretada por Gema Matarranz y Marta Megías dirigidas por Juan Carlos Rubio, autor del texto. Ayudante de dirección: Luis Miguel Serrano. Diseño de Iluminación: Juan Felipe Tomatierra. Diseño de escenografía: La Alegría. Construcción de escenografía: Álvaro Gómez Candela. Sonido: Ángel Moreno.

Tras su estreno, girará por España, y en estos primeros meses lo hará por Almuñécar (Granada), Córdoba, Murcia, Montijo (Badajoz), Coslada (Madrid), etc.







Se el primero en comentar

Deja un comentario