Gabriel Silva olvida la debacle de Las Palmas

El defensa brasileño se ha afianzado en el once desde la llegada de Alcaraz y ha dejado atrás las malas sensaciones que dio con Jémez

Gabriel-Silva- Granada CF - Real Sociedad
Gabriel Silva pugna un balón con Vela | Foto: Antonio L. Juárez
Daniel Sánchez-Garrido @Danisgr
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Uno de los jugadores que más agradece la llegada de Lucas Alcaraz es Gabriel Silva. El lateral izquierdo brasileño ha conseguido de la mano del técnico granadino crecer dentro del equipo y ofrecer sus mejores actuaciones como rojiblanco horizontal.

El rendimiento de Silva cambió radicalmente de la pretemporada al inicio de curso. El jugador cedido por Udinese parecía ser uno de los fijos en el once del extécnico nazarí Paco Jémez durante la pretemporada, pero todo se torció en su debut liguero como jugador granadinista.

El carrilero se había perdido la jornada 1 por una sanción, por lo que se estrenó en la jornada 2, en Gran Canaria, en el feudo de Las Palmas. Aquel partido sería a la postre difícil de borrar para Gabriel, que tuvo una actuación desastrosa en el poco tiempo que estuvo sobre el terreno de juego. Jémez decidió sustituirlo a los 32 minutos, dándole entrada a Gastón Silva en su lugar.

Ser cambiado en la primera mitad es una de las peores experiencias para un futbolista. Quedas señalado como el culpable de cualquier situación anómala que se esté dando. Eso fue lo que sucedió a Gabriel Silva. Su cara al ser sustituido fue un poema en el que era el primer partido oficial con su nuevo equipo.

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Gabriel Silva, en el momento de ser cambiado ante Las Palmas

El brasileño entró en depresión y no volvería a jugar con Paco Jémez. Su confianza era nula. Prácticamente se había convertido en un descarte. Sin embargo, todo cambió con la marcha de Jémez. Fue uno de las novedades que ya introdujo Lluís Planagumà en el partido que dirigió ante el Leganés, completando durante los noventa minutos una solvente actuación.

Con la llegada de Alcaraz, Gabriel Silva continuó como titular en el once, olvidando la debacle de Las Palmas. Lo ha jugado prácticamente todo, excepto dos partidos que se ha perdido por lesión, ante Osasuna, en la ida de la Copa del Rey, y ante el Celta de Vigo. Ya acumula un total de 842 minutos en liga. Con el paso de los minutos, el brasileño ha demostrado ser un lateral de garantías y va ganando en confianza y seguridad en cada partido.







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