El SERCLA salvó en Granada más de 200.000 horas de trabajo y ahorró 10 huelgas el año pasado

Recién salidos del horno, los datos que ofrece el Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía -SERCLA- con respecto a 2014 muestran la evolución de la conflictividad en Andalucía y en Granada. El dato más llamativo en este sentido lo ofrece el número de expedientes que este mecanismo tramitó durante el año pasado, 880, un 22 por ciento menos que en 2013, uno de los años más ajetreados para este sistema dependiente del Consejo Andaluz de Relaciones Laborales. Otro número relevante es el porcentaje de avenencias que consiguió propiciar el SERCLA: un 44,6 por ciento del total que en Granada alcanza el 52,17.

LOS MOTIVOS DE LOS CONFLICTOS EN EL MERCADO LABORAL GRANADINO

De las 778.016 horas de trabajo que el SERCLA ayudó a salvar en la comunidad, 201.800 pertenecen a la provincia de Granada, la segunda en esta materia, sólo por detrás de Huelva.

Por expedientes, Granada aglutina el 10,9 por ciento de los abiertos en Andalucía, unos casos que implicaron a 7.990 empresas y más de 45.000 trabajadores de toda la provincia. "Se trata de una valiosa herramienta al servicio de los trabajadores", explica Ana María Fernández, coordinadora de la participación de UGT Granada en el SERCLA.

En cuanto a los motivos que propiciaron la intervención del SERCLA, el informe deja claro que el principal conflicto de los trabajadores con sus empresas tiene que ver con la aplicación del convenio vigente. En el conjunto de Andalucía, esta materia propició 394 expedientes, casi la mitad. La propia negociación del convenio, la aplicación de las normas y el impago de los salarios son otras de las principales reivindicaciones que terminan llegando a este mecanismo.

Y por sectores, como recuerdan desde los propios sindicatos los servicios auxiliares y las actividades administrativas son las áreas más afectadas al representar más del 15 por ciento de los expedientes que llegan hasta el SERCLA; pero en esta lista también se encuentran en posiciones avanzadas el transporte y almacenamiento, la hostelería o la industria manufacturera mientra que por el contrario, las actividades financieras, la educación y las actividades inmobiliarias no llegan al 1 por ciento del total de casos.